PERO, YO SOY JOVEN

PERO, YO SOY JOVEN La juventud tiene dimensión fresca, productiva y alegre: esta es una edad de idealismo, destino, propósito y mucha esperanza. Todas estas cualidades de la vida son muy importantes y necesarias para impulsar a las futuras generaciones hacia nuevas hazañas y conquistas, elementos imprescindibles para el desarrollo sano de la raza humana. Entonces, al joven se le debe dar mucho y del joven se debe esperar la respuesta correspondiente. Sin embargo, por ciertas razones no tan fáciles de explicar, la misma fuerza, característica de la juventud, rara vez se ha dedicado a los llamamientos nobles; en cambio, se ha utilizado como excusa para escapar de la responsabilidad. El refrán ya anticuado "pero, yo soy joven" se presenta como una justificación para el descuido de las tareas que sólo pueden cumplirse con la energía que yace en los que están comenzando sus vidas en el mundo adulto. Ser principiante no excusa a...