¿Sabías que?
La Biblia judía y el Antiguo Testamento contienen el mismo material pero están divididos de manera diferente. La Biblia hebrea contiene 24 libros que se dividen en tres secciones llamadas la Ley (Torá), los Profetas (Nevi’im) y los Escritos (Ketuvim). Hay 5 libros en la Ley, 8 libros en los Profetas y 11 libros en los Escritos. El Antiguo Testamento cristiano tiene 39 libros y se divide en libros de ley, historia, poesía y profecía.
El libro más _largo_ de la Biblia es los *Salmos*; el más corto es 3 Juan, y los libros de longitud media son Miqueas y Nahúm.
El libro más _grande_ del Antiguo Testamento es los Salmos, y el más _corto_ es ¨*Abdías*.
El libro más _corto_ del Nuevo Testamento es *3 Juan*, si se cuenta por palabras. Si se cuenta en versículos, el más corto es 2 Juan.
El libro más _largo_ del Nuevo Testamento es el evangelio de Lucas, y Mateo y Hechos tienen más capítulos que los demás (28).
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Hay gran necesidad de avivamiento espiritual en esta generación.
Dejemos de contratar a profesionales para servirnos y lleguemos a ser personalmente siervos de Cristo (Lucas 9:23).
Dejemos de seguir la enseñanza específica de un seminario y consideremos la Palabra de Dios como verdad (Juan 8:32).
Dejemos de pretender que los predicadores son inspirados y que reciben revelación directa de Dios y estudiemos personalmente la Palabra escrita de Dios para conocer la verdad (2 Timoteo 2:15; 3:16).
Dejemos de aceptar la noción falsa que todos van a ir al cielo y considerémonos pecadores que necesitamos conversión (Mateo 7:13-15,21).
Demandemos la predicación que advierte a los pecadores de la condenación del infierno (Mateo 3:7-10; 5:22; 10:28; 16:23; 25:46).
Dejemos de ser manipulados por las tradiciones y doctrinas humanas y aferrémonos a la doctrina de Cristo (Mateo 15:9; Marcos 7:7-9; 2 Tesalonicenses 2:15-17; 2 Juan 9).
Comencemos a tomar nuestro rol como siervos seriamente y consideremos que hemos dado voluntariamente el control de nuestras vidas a Cristo (Romanos 12:1; Gálatas 2:20; 1 Corintios 6:20).
Evitemos que los concilios externos nos controlen, como también las convenciones, conferencias y credos humanos, y consideremos nuevamente el liderazgo congregacional (Filipenses 1:1; Hechos 14:23).
Pidamos a nuestros miembros que den su dinero en un nivel local primero para sostener el evangelismo local y la benevolencia (1 Corintios 16:1-2; Hechos 2:44-47; 4:33-35).
Exhortemos a cada creyente a participar sinceramente en la adoración (Juan 4:24), no como espectador, sino como sacerdote (1 Pedro 2:5,9; Romanos 12:1-2)
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Valioso para nuestro conocimiento y edificación. Gracias a Dios🙏
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