LAS HOJAS CAEN

           Las hojas caen 

      El otoño ha llegado en todo su fuerza y gloria, un cuadro de colores impresionantes que reemplazan a las hojas verdes del verano. Este fenomeno espectacular parece ser un aviso del fin de un ciclo, pero no esocasion de triteza.. el despliegue brillante no es una protesta sino una acentuacion de una vida productiva y beneficiosa para los animales, las aves y los seres humanos que aprovechan de su procteccion, su belleza y su sombra.x

      Y despues, las hojas caen, y aun en esta trasformacion de lugar y esencia rinden su beneficio al tronco del arbol que les da vida. Lo que pasa en el ciclo de las hojas es un testimonio fuerte a favor de una vida que produce mientras recibe, conforme a su proposito natural. Es una vida de otro como su contribucion a otros.

     El hombre tambien tiene un gran proposito en su mision terrenal, la cual no es solo recobir sino dar lo correpondiente. Sin embargo, cuando este no entiende bien el proposito de darse a si mismo, pierde la perspectiva y la oportunidad de recibir lo mas sicnificativo de todo, la vida eterna. Y esta vida no solo se goza en el ´´mas alla´´, despues de la resurreccion.

       Claro, en la resurreccion todo se perfeccionara pero, cual el ejemplo de la hojas, la vida terrenal puede volverse gloriosa, productiva y llena de significado. No tenemos que esperar la vida gloriosa, la podemos tener ahora en Cristo Jesus El dijo.. ´´Yo he venido para que tengan vida, y para que la tenga en abundancia´´ { Jn. 10..10}.

       Pero, muchas veces seguimos el ejemplo perfecto de la hoja que anuncia positivamente su dependencia antes de caerse, al contrario, usualmente protestamos vigorosamente el provenir inevitable.

       Mas no tiene que ser asi y no debe ser asi. Como cristianos confiamos en el mismo poder que resusito a Cristo de la muerte. Y, con esta confianza, animamos los unos a los otros con esta verdad.. ´´Cuando se siembra, la semilla tiene que morir para que tome vida la planta . . . Lo que se entierra es despreciable, lo que resucita es glorioso. Lo que se entierra es un cuerpo material, lo que resucita es un cuerpo espiritual´´{ 1 Co. 15..36, 43,44 }.